¿Una nueva forma de tatuar o de sufrir?

La escarificación es una forma de tatuarse que se ha popularizado en muchas partes del mundo, consiste en hacer dibujos en la piel para después cortar la misma, de esta manera el diseño realizado queda en nuestra piel de por vida.

Esta peculiar forma de tatuarse, fue fruto de la influencia de la cultura africana, donde la escarificación era exclusiva de las mujeres, y consideraban esta práctica como una forma de fortalecer la belleza. Muchos pueden ver este tipo de práctica como un tipo de arte, mientras que otros pueden verlo como una práctica de masoquismo puro no apta para cardíacos.

 

Existen 2 formas de escarificación.

1. Marcado o branding

- Cautery branding. En este proceso se utiliza un aparato eléctrico que expulsa una corriente de aire, dejando un dibujo que cicatriza en forma de quemadura.

- Cold branding. Aquí se utiliza el nitrógeno líquido formando una cicatriz queloide

- Laser branding. Este proceso es de los más rápidos y  precisos que existen, al ser un tipo de laser trabaja de forma directa sobre la piel, considerada la menos doloroso.

- Strike branding. Se somete a un metal a altas temperaturas y con la ayuda de una pinza se va formando el dibujo, es parecido al marcado de ganado.

2.  Cortes

 

- Hatching. Mediante un bisturí quirúrgico, se realizan cortes en la piel.

- Skin removal. Con un Bisturí y la ayuda de otras herramientas, se retira la piel para poder dejar cicatrices más profundas.

- Packing. Aquí también se realizan cortes profundos al igual que en el skin removal, pero con la diferencia que los cortes son rellenados con diferentes sustancias brindando color a la cicatrización. Ojo es una de las técnicas más arriesgadas porque el paciente puede sufrir una infección.

- Ink rubbing. Es parecido al tatuaje convencional, en este caso la piel se raspa y se añade la tinta.

- Abrasión. Se procede a raspar la piel con un objeto.

Se dice que pocos profesionales se arriesgan a realizar la escarificación en un estudio de tatuaje convencional, ya que conlleva múltiples riesgos para el paciente.

 

Como alguien una vez dijo todo es cuestión de gustos no hay por qué condenar este tipo de prácticas, pero siempre es bueno informarse bien para realizarse un tatuaje en un lugar seguro y confiable.